Problemas reales “Odio mi cuerpo y me da miedo verme al espejo”

Esta historia es la de muchas chicas con el mismo problema:

María compraba todas las revistas de moda y veía siempre con envidia esas modelos guapísimas, rubias y esbeltas que estaban en las páginas.

A ella le gustaba pensar que un día ella podría estar en las revistas, vistiendo de una forma espectacular y siendo querida y admirada por miles.

Pero todo cambiaba cuando se miraba al espejo y el cuerpo que tenía no era nada parecido al de esas modelos.

Entonces sufría y se odiaba, porque no podía tener una silueta delgada.

Así que un día decidió dejar de comer. Comía lo mínimo para no morirse de hambre y si de repente comía de más, vomitaba todo.

Razones por las que debes amar tu cuerpo así como es

Poco a poco su cuerpo empezó a cambiar, a ser más delgado. Pero todo el día se sentía cansada, la ropa no le quedaba y su cuerpo, en lugar de verse bien, se veía sin vida, como una pequeña flor que le hace falta agua.

Además, sus amigos la veían y se preocupaban por ella, porque siempre estaba débil, con ojeras y sin ganas de salir a divertirse.

Ella se miraba al espejo y la imagen que veía le agradaba más que la anterior, pero a pesar de eso, siempre se sentía triste. Todo el tiempo pensaba en comida,pero le daba miedo comer algo por temor a engordar y que ya no se pareciera a las chicas de las revistas.

Tenía el cuerpo que quería, pero no era feliz, no se sentía bien y siempre vivía con el terror de subir de nuevo.

Así siguió hasta que un día, un dolor muy fuerte en el estómago no la dejó levantarse de la cama. Estaba doblada de dolor y las lágrimas se le salían sin que ella lo pudiera evitar.

Sus padres la vieron muy mal y la llevaron al médico y cuando este la revisó, se dio cuenta que tenía sumamente dañado el estómago porque los jugos gástricos le habían destruído las paredes.

El médico le dijo que si seguía así tendría problemas más graves que no se podrían solucionar nunca más.

Fue así que ella dejó de creer que el cuerpo de las modelos era el mejor y comenzó a amar su propio cuerpo. Se cuidaba, pero no exageraba, pues sabía las consecuencias. Trató de hacer ejercicio, comer saludable y poco a poco dejó ese odio a su cuerpo y fue más feliz.

Este es el caso de muchas chicas e incluso  mujeres màs grandes. Se nos ha enseñado que el cuerpo esbelto es el ideal, pero la realidad es que todos los cuerpos son hermosos, sin importar su talla.

AMA TU CUERPO TAL Y COMO ES :)